Me encontraba recostado en mi cama una tarde de noviembre,
Recordando aquellas cosas que no valían la pena recordar
La luz se asomaba tímidamente entre las cortinas de mi cuarto reflejando un hilo de luz sobre toda aquella oscuridad en la cual me encontraba sumergido
Aquel era un lugar olvidado por el tiempo en el cual los días no pasaban
Y las noches nunca daban campo al sol….
De repente una leve brisa entro hacia mí como si fuera el último respiro de un compareciente, y abriendo la puerta vi la sombra de un hombre, o de alguien que lo fue, huyendo de mí y ocultándose rápidamente…
Exaltado me levante, con miedo y agitado por aquella visión que me pareció haber visto
Conmocionado todavía no sabia si había sido una ilusión o si en verdad había alguien allí, por lo cual medite un momento, respire lo mas que pude y con el valor que no tenia,
Me fui a buscar aquello a lo que mis miedos más temían…
Con cada paso que daba mi corazón latía más fuerte, con miedo a encontrar lo inesperado
Mi mente nublada por pensamientos oscuros no dejaba razonar con facilidad
Cada paso daba campo a una sensación, tímidamente amarrada a la locura, mi cabeza se perdía entre ilusiones y fantasías inciertas que en aquel momento me agobiaban...
De pronto la tarde dejo sus últimos rayos de sol en la montaña y dio paso a la penumbra, todo oscureció, al igual que mi alma no veía nada con claridad, solo sombras que susurraban palabras incoherentes y no me dejaban mirar la realidad
Frío se torno todo cuando por fin encare a mi miedo, a mi peor enemigo
Al que sabía todo de mí y podría acabar con todo lo que soy
Me encontré conmigo mismo…con las sombras de mi pasado, con aquel que había cometido los más atroces pecados, y que nunca pidió perdón…
Me miro fijamente con esa mirada penetrante y vacía
Me susurro palabras al oído
Y se perdió entre toda esa oscuridad…
Ahora me doy cuenta de aquello que me dijo en aquella tarde de noviembre
Y más que un enemigo ahora es solo parte del pasado…parte del recuerdo…
Ahora es solamente parte de un capitulo del libro que escribo cada uno de mis días…
Y si te preguntas que fue lo me dijo sus palabras fueron las siguientes:
“No quiero volver a este mundo nunca mas
Solo quiero descansar de tantas horas…
No me dejes volver…no me dejes regresar…
Un buen hombre eres…y en un buen hombre te convertirás…
Pero si me dejas regresar…ten presente que será mejor un destino con tu muerte
Que una vida con un alma resentida de tanto odio y pesar…”
Recordando aquellas cosas que no valían la pena recordar
La luz se asomaba tímidamente entre las cortinas de mi cuarto reflejando un hilo de luz sobre toda aquella oscuridad en la cual me encontraba sumergido
Aquel era un lugar olvidado por el tiempo en el cual los días no pasaban
Y las noches nunca daban campo al sol….
De repente una leve brisa entro hacia mí como si fuera el último respiro de un compareciente, y abriendo la puerta vi la sombra de un hombre, o de alguien que lo fue, huyendo de mí y ocultándose rápidamente…
Exaltado me levante, con miedo y agitado por aquella visión que me pareció haber visto
Conmocionado todavía no sabia si había sido una ilusión o si en verdad había alguien allí, por lo cual medite un momento, respire lo mas que pude y con el valor que no tenia,
Me fui a buscar aquello a lo que mis miedos más temían…
Con cada paso que daba mi corazón latía más fuerte, con miedo a encontrar lo inesperado
Mi mente nublada por pensamientos oscuros no dejaba razonar con facilidad
Cada paso daba campo a una sensación, tímidamente amarrada a la locura, mi cabeza se perdía entre ilusiones y fantasías inciertas que en aquel momento me agobiaban...
De pronto la tarde dejo sus últimos rayos de sol en la montaña y dio paso a la penumbra, todo oscureció, al igual que mi alma no veía nada con claridad, solo sombras que susurraban palabras incoherentes y no me dejaban mirar la realidad
Frío se torno todo cuando por fin encare a mi miedo, a mi peor enemigo
Al que sabía todo de mí y podría acabar con todo lo que soy
Me encontré conmigo mismo…con las sombras de mi pasado, con aquel que había cometido los más atroces pecados, y que nunca pidió perdón…
Me miro fijamente con esa mirada penetrante y vacía
Me susurro palabras al oído
Y se perdió entre toda esa oscuridad…
Ahora me doy cuenta de aquello que me dijo en aquella tarde de noviembre
Y más que un enemigo ahora es solo parte del pasado…parte del recuerdo…
Ahora es solamente parte de un capitulo del libro que escribo cada uno de mis días…
Y si te preguntas que fue lo me dijo sus palabras fueron las siguientes:
“No quiero volver a este mundo nunca mas
Solo quiero descansar de tantas horas…
No me dejes volver…no me dejes regresar…
Un buen hombre eres…y en un buen hombre te convertirás…
Pero si me dejas regresar…ten presente que será mejor un destino con tu muerte
Que una vida con un alma resentida de tanto odio y pesar…”
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